viernes, 2 de octubre de 2020

Capítulo 44










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Tanto para Juan como para Cruz la noche es larga. Cada uno en una cama pero deseando compartirla con el otro. Cuando el uno duerme el otro se levanta. Lo mira con deseo. Le gusta verlo dormido. Le excita ver su torso desnudo.
--es un ángel... dormido es un ángel --dice Juan.
Lo mira con ganas de acariciarlo. De besarlo.
--si me atreviera...
Pero ni siquiera se atreve a confesárselo así mismo.  Cuando Cruz se mueve vuelve a su cama con miedo que lo haya descubierto. Cruz se levanta. Se queda mirando a Juan con deseo.
--boludo...  pero un boludo fascinante.¡¡que bueno está el condenado¡
Cruz mira los marcados pectorales de Juan. Esos pectorales que él tantas veces ha lamido, ese cuerpo que se conoce de memoria y tanto le gusta.
--¿y si lo despierto?
Va a posar su mano en el pecho de Juan pero se retiene:
--¿¿y si se burla de mí?
Vuelve a la cama. Juan abre los ojos frustrados.
--¿¿qué nos está pasando??














Al día siguiente, Cruz está desnudo en la ducha. Juan a su lado afeitándose. No le saca los ojos de encima. Está frustrado porque la noche anterior no curtieron y es algo que le fascina. Además ahora está demasiado acostumbrado al cuerpo de él y no está seguro de poder vivir sin eso. Cruz se da cuenta de la manera tan intensa en la que Juan lo mira. Está molesto porque lo dejó con las ganas.
--¿¿¿qué mirás? ¡¡ya sé que estás enamorado de mi pero ni modo. Yo no te doy pelota¡
--¿¿¿qué decís?? ¡¡no me movés ni un pelo¡
--si claro...
Cruz sale de la ducha todo desnudo. Juan vibra. Desnudo y mojado es aún más bello.
--Nunca vi algo tan hermoso. --piensa Juan.
Cruz se pega a Juan:
--¿me pasás la toalla?
Juan está temblando:
--¿¿qué pasa? ¿no tienes manos?
Y Cruz pega su cuerpo al de él. Juan vibra al sentir el aparato de Cruz enganchado a su cola. Desea girarse y besarlo pero no quiere que luego Cruz se ría de él.
--¿¿qué estás haciendo? ¿¿es que me quieres seducir? --jadea Juan.
Cruz agarra la toalla. Se seca la cabeza tranquilamente. Se le mueve los genitales. Juan está muy encendido.
--Yo no sé que tienes en la cabeza, algo podrido.. Claro soy el único que por pena curtió contigo y claro ahora estás muy necesitado. Yo sólo quería tomar la toalla.
Juan está furioso y está muerto de deseo. Sabe que si sigue un rato más allá no se podrá controlar y se tirará a sus brazos.
--¡¡no tengo tiempo para tus mariconadas, las chicas nos están esperando¡ ¡¡si estás recaliente por la ausencia de sexo no es mi culpa¡
A Cruz le da rabia que Juan no caiga en sus provocaciones pero tampoco quiere caer él en su juego. Se muestra indiferente:
--Yo, yo esta noche voy a curtir con tu hermanita Andreita. Eres tú el que tienes que suplicar sexo a alguien que te detesta, que lo hace para hacerte el favor...
--¡¡yo jamás te he pedido el favor¡
Cruz lo mira divertido:
--¿¿y quien dijo mi nombre?
--¡Vete a la mierda¡
--¡que boquita sucia¡
Juan se va muy enfadado. Cruz se queda sonriendo. Pero luego su rostro se llena de tristeza. Echa de menos los besos y los abrazos de Juan. 

Van juntos a la habitación de las chicas. Juan detrás de Cruz deleitándose por la bella forma de la cola, por la manera de caminar de Cruz.
--¿¡es que tienes que ir pegado a mí? --dice Cruz.
--¡¡es que vas muy lento. Ya espero que Andreita te eche un polvo porque lo necesitas¡
A Juan le da mucha rabia que Cruz se acueste con su supuesto hermano pero demuestra indiferencia. A Cruz le da mucha rabia que a Juan no le importe que se acueste con Andrea. Se consuela atacándolo.
--Espero que tu hermano haya salido a vuestro padre¡¡estaba muy buen dotado¡
A Juan le molesta mucho la cara de depravado de Cruz al pensar en el cuadro de Benicio. Le da rabia la posibilidad que en serio Cruz no siente nada por él y todo sea por la atracción que siente por el cuadro.
--¡¡no te pases  hablas de mi padre¡
--¿¿celoso? --Cruz burlón.
--¡¡no, lo que pasa es que eres un depravado..Una bestia¡
--¡¡ya pará¡ ¡¡Espero que el hermanito tengo mejor carácter que tú ¡ --Cruz riendo.
--¡¡si mi hermano se parece en algo a mí no te va a dar bola¡ ¡¡seguro¡
Cruz sonríe excitado y dice:
--si tu hermano Andreita se parece algo a ti el primer día que me vea se va a morir de mí y estaremos cogiendo como pasó contigo ¿¿te acuerdas? Te me regalaste al toque.
Cruz le guiña el ojo. Juan tiembla al recordar lo bien que se lo pasó ese día.
--fue... fue... fue...
Juan balbucea. No sabe qué decir.
--Espero que sea mejor en la cama que tú --Cruz burlón.
--¡¡el problema no soy yo sino tú que eres un inútil¡ ¡¡ya te lo dirá él¡
Los chicos se miran con ganas de besarse y matarse. Están ya frente al del cuarto de las chicas. Clara abre la puerta.
--¡ya dejen de boludear y pasen¡
Juan y Cruz quieren pasar los dos a la vez y se quedan trabados en la puerta. Los dos se pelean para pasar el primero.
--¡¡tú con tal de estar pegado a mí haces lo que sea¡¡ --Cruz.
--¡¡has sido tú el que te has metido¡
Los dos siguen peleado.
--¡¡ya pasen¡ --Clara.
Se miran desafiante. Luchan por ser el primero. Los dos caen al piso. Tan cerca pero tan lejos.
--¿¿laburamos?
Los dos chicos se quedan el uno frente al otro mirándose con deseo y atacándose. Se aman y se odian. Las chicas van hablando. A Juan le duele mucho cada vez que se menciona a Andrea. Ni piensa en que se está acercando a su familia biológica. Lo único que siente son los celos porque Cruz se va a acostar con otro. Lo ve tan decidido a hacer lo que sea por acercarse al cuadro que piensa que tal vez si lo utilizó, que se acostó con él a la fuerza.
--¿hasta donde eres capaz de llegar por llegar hasta ese cuadro? --Juan
Los dos chicos se miran desafiantes:
--fijate que he llegado a revolcarme contigo.
Cruz habla con un desprecio que lastima mucho a Juan. Prefiere no decir nada. Cruz echa de menos enojarse con Juan. Ve algo diferente en su mirado. Una sombra de tristeza que lo cautiva. Ninguno de los dos dice nada.
--¿¿¿cual es el plan? --dice Juan.
Se quiere mostrar frío aunque no puede evitar mirar a Cruz con amor. Cruz siente que Juan lo mira de manera diferente y no le nace atacarlo. Los dos no dejan de mirarse con deseo, con frustracion. Mientras que las chicas le cuentan el plan.
--La Tia Charlie me contó que papá hacia magia y que así enamoró a mamá.
Juan se anima a atacarlo:
--tú puedes hacer de payaso. Te va muy bien.
Cruz ve a Juan herido y se queda callado. Los dos se miran de reojo, vibran al mirarse.  Es Clara la que sigue:
--esperemos que esto sea algo que se herede --Cruz.
--si no te tocará aprender. --dice Maria Lidia dándole un manual de magia.
--¿¿qué es esto?
Juan le pone la mano en el muslo burlón y dice:
 --creo que vas a tener que seducir a Andreita con magia así que me parece que si no se espanta al mirar tu cara se espantará con ese mago trucho...
Cruz ríe molesto por las burlas de Juan:
--muy gracioso.
Pero luego mira a las chicas:
--pero tiene algo razón... ¿¿como lo voy a enamorar así? lo mejor es que lo mire, se derrite y me lo llevo a la cama. Así de fácil.
Los dos chicos se miran y antes que Juan pueda decir algo, Cruz dice:
--así me pasó con el hermanito --mirando a Juan-- seguro que me funciona...
Juan se ruboriza. Cruz le guiña el ojo.




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